Ayer fuimos a cenar 6 amigos al restaurante Agua Salada en la calle San Simón en Santander.
El sitio es peculiar, pequeño, de ambiente agradable con una decoracion sobria. Hay una barra pero solo la usan para servicio de las camareras. Las mesas funcionan con reserva así que ambiente tranquilo.
Empezamos con la carta.
Comenzamos con el guiso de setas... y los nooddles yaki...
Los dos platos estaban muy buenos. A mi en especial me gustó el guiso de setas.
Continuamos con un poco de pescado:el bacalao con romescu... y el curry rojo con merluza, verdura y langostinos que venía acompañado de arroz basmati.
También nos parecieron ricos los dos platos. El curry picaba un poco.
Y por último tomamos dos platos de carne: pastel de rabo de buey... y entrecot de ternera tudanca.
Los dos platos muy ricos. El entrecot es un plato muy tradicional y sin embargo también nos sorprendió por su sabor, carne blanda y sabrosa y con unas patatas fritas muy ricas.
Llegó el turno de los postres... ¿para qué complicarnos? Pues uno de cada😊
Estaban todos bien pero yo me quedo con el cremoso de fruta de la pasión con plátano, exquisito.
De vino tomamos uno del Bierzo
Como conclusión estaba todo muy rico y bien presentado, las cantidades no son muy generosas, el cestito de pan muy pequeño pero nos le rellenaron las veces que quisimos. El ambiente y trato muy agradable. No hubo lugar a mucha sobremesa, salimos a las 12.30 y ya éramos los últimos.
Y para que podais juzgar, la cuenta para 6 comensales.
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